Se podía cortar la tensión con un cuchillo a pocos minutos del mediodía de ayer en la plaza universidad de Barcelona. Decenas de seguidores de Radiohead se arremolinearon de pronto alrededor de un chico que de pronto, y sin hacer ruido, empezó a repartir el ansiado trofeo: un ejemplar en papel del primer y único ejemplar del periódico The Universal Sigh (sí, el nombre proviene de “Bloom”, el primer tema de The King of Limbs).

Tras huir de la marabunta, y aunque muchos ya habían podido leerlo digitalmente, ya que no tardaron en circular por Internet versiones escaneadas, no tardamos en buscar lo que muchos habíamos soñado: un anuncio oficial de su inminente gira o alguna mención clara al lanzamiento de una hipotética segunda parte de The King of Limbs. Sin embargo, ni lo uno ni lo otro, pero sí algún que otro detalle para reflexionar y, quién sabe qué más.
De entrada, sorprenden los dibujos y las ilustraciones del británico Stanley Donwood, muy en la linea del disco, por supuesto, y la cantidad de textos que, de entrada, no parecen hablar de forma directa sobre la banda, sino más bien sobre el leitmotiv de su último trabajo. En efecto, en un primer escrito, sin firma,con una inquietante historia dividida en cuatro partes, con algunos pasajes que, personalmente, me han recordado al mítico videoclip de “There There”. Quizá la historia pierde su gracia al estar traducida al castellano (no es precisamente una traducción demasiado afortunada, en el sentido de que se pierde gran parte de la poética que el texto original lleva aparejada, si se atreve con la versión inglesa).
Pero sigamos, la siguiente página es quizá una de las más reveladoras. Bajo el título “¡A través de una gran falla” (“Across a great divide”), tras una texto que mezcla diversas estrofas del disco (especialmente de “Morning Mr. Magpie” y “Lotus Flower”), nos encontramos con una especie de presentación de una serie de criaturas del universo de The King of Limbs. Curiosamente, la que hemos podido ver en la portada del álbum aparece bajo el nombre del disco, así como “Codex” (la sexta canción), una figura que ya habíamos podido ver en la web de la banda. De las nuevas formas: “Root of Roots”, “Ragnorok”, “Urflanze” y “Axis Mundi”, poco se sabe, pero uno no puede dejar de pensar que harán referencia a futuras canciones (y quien sabe si discos) de Radiohead.
Después nos encontramos con un escrito de Robert McFarlane, autor de The Wild Places, entre otros. En este nuevo relato conoceremos las reflexiones de un chico que trepa a su árbol favorito para relajarse y pensar sobre lo negativo de la vida en la ciudad. Le siguen dos páginas con enigmáticas ilustraciones bajo el título “Spare me all yor waving flags” (préstame las banderas que ondeas) y “Gather The Pitiful” (reune al tullido). Después nos encontramos con una página con lo que parecen estrofas de canciones (o simples poemas beat), en diversas tipografías. Quién sabe si algún día podremos escucharlas con el timbre de la voz de Thom Yorke (quien, precisamente, se encargó de repartir los periódicos en Londres).
En “Bosques de la mente”, relato a cargo de Jay Friffiths, conoceremos una serie de reflexiones amazónicas, de alto contenido naturalista en el que no deja de hablarse de “la comedia de la vida”. Por último, tras una ilustración bajo el eslogan “Infinity”, un último texto de nombrado Stanley Donwood con el nada arriesgado título “Vende tu casa y compra oro”. Un relato acongojante, sombrio y casi armagedónico. Y en la contraportada, un nuevo dibujo al estilo de la carátula del disco con un código QR en su parte final que no es más que un enlace a la web del diario (http://www.theuniversalsigh.com/).
Como decimos, pues, no hemos logrado sacar nada demasiado en claro. Sólo el tiempo dirá si nuestras predicciones sobre nuevas canciones están en lo cierto. En cualquier caso, quienes nos hicimos con un ejemplar también recibimos un código-identificador único a introducir e algún lugar de la página web del periódico. En cuanto podamos hacer uso de él, no dudéis que os haremos saber qué nuevas sorpresas nos depara la banda de Thom Yorke.
4 comments
Si alguien se quedó sin el, que sepa que puede conseguirlo en una de las tiendas de música de tallers (No recuerdo el nombre) pero está en frente de un supermercado de comida china.
Yo entré por casualidad y lo encontré ^_^