Y éste, sin duda, es otro de esos discos imprescindibles. Uno de esos discos que nos hacen recordar que amamos la música y que lo hacemos sin reservas. Una joya del denominado rock progresivo.
Uno no sabe ni por dónde empezar la crítica, porque no se puede describir Crisis? What Crisis? de Supertramp de una forma técnica, alabando la instrumentación prodigiosa o las armonías vocales inolvidables, no. Éste álbum es todo una descarga a esa parte del cerebro -¿¡Qué se yo cuál!?- que se encarga de administrar nuestras emociones de simple mortal.
En su día se acusó a Supertramp de ser demasiado comerciales, pero creo que el tiempo ha hecho justicia con esta banda y su trabajo, todo un alarde de creatividad y pasión, todo un monumento de la música pop.
Temazos como “Sister Moonshine” o “Easy Does It” forman ya parte de la historia, y seguramente fueron los que más trascendieron en su día. Sin embargo, quien escribe tiene una confesable pasión por una pista medio escondida en ese elepé, que ya desde crío, cuando su padre colocaba la aguja sobre ella en ese viejo tocadiscos, le hacía vibrar. “Another Man’s Woman” es para mí la mejor canción de Supertramp y una de las mejores canciones de la música ligera de todos los tiempos.
Rick Davies y Roger Hodgson, vaya dos. Siempre con la sombra Lennon y McCartney acechando. Si no hubiera habido también una Yoko en Supertramp…
Pero en definitiva, ese álbum forma ya parte de la leyenda. Os sugiero que no os lo perdáis –o que no lo olvidéis-, vale mucho la pena, de verdad.