Subes a la terraza de tu casa un domingo al mediodía. Día despejado, sol radiante, diario deportivo y un paquete de Marlboro. Todos los astros se alinean para que disfrutes de uno de esos momentos que bien se merecen el calificativo de “momento perfecto de relax”. Bueno, todos los elementos no concuerdan, falta la banda sonora. Coges el reproductor de mp3 y buscas un artista que se adecue a la situación. ¿Jimmy Eat World? No. ¿Surfact? Demasiado duros, quizás. ¿She & Him? Tampoco. Es en ese momento que piensas “¿Y si me lanzo a probar “Come Back As Rain” de Good Old War?”. Y lo haces. Y, casi sin querer, das en el clavo.
Hay algo de este disco que me tiene, al menos relativamente, hechizado. Está claro que es un LP costumbrista, si. Los de Philadelphia han continuado con ese buen folk que ya destilaron en sus dos anteriores LPs – “Good Old War”, “Only Way To Be Alone” – y que parece encontrar su momento de eclosión total en este “Come Back As Rain” que tiene auténtica perlas de menos de cuatro minutos de duración. Una de ellas es ‘Amazing Eyes’, tercer tema del disco que pese a ser muy sencillito tiene una deliciosa aura que lo hace ser un corte especial. Probad la versión en directo, que se asemeja tremendamente a la de estudio:
El single ‘Calling Me Names’ es quizás lo más conocido de este tercer trabajo de los estadounidenses. Entendemos que esto sea así (de hecho hasta cuenta con un bello videoclip y todo) pero consideramos que la chicha está en otro lado de un “Come Back As Rain” que, pese a ser demasiado lineal, tiene su qué. ‘Not Quite Happiness’ es otro gran corte que tiene ese punto caluroso, exquisito y vibrante que lo hacen ser una pieza francamente brillante. O ‘Present For The End Of The World’, que sirve como perfecto colofón para un disco que sirve como un adecuado compacto para tener en cuenta de cara a nuestros momentos de máxima tranquilidad.
Si eres de los que adoras el folk divertido y veraniego, “Come Back As Rain” es una de las primeras propuestas de este año para tener en cuenta de cara al veranito que se avecina. La alegría siempre se acaba contagiando con unos chicos que siempre van con una amplia sonrisa por delante.
Fuente | 77 de 100
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