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[Recomendación] Nine Inch Nails – Hesitation Marks (2013)

Existe una verdad universal sobre todo aquello que publica Trent Reznor; su propuesta puede gustarte más o menos pero seguro que se trata de una trabajo de una calidad aplastante. Si alguien puede sacarle partido a tu nuevo equipo de sonido esos son los Nine Inch Nails.

Trent Reznor es uno de aquellos músicos con capacidad suficiente para enlazar un proyecto con otro. Nos demostró una vez más su valía como compositor, junto con Atticus Ross, con la banda sonora de The Social Network y The Girl With The Dragon Tattoo. Después vino con una fresca propuesta How to Destroy Angels, proyecto desarrollado junto a su esposa Mariqueen Maanding y Atticus Ross. Ahora vuelve con los más que míticos NIN para presentarnos “Hesitation Marks”, un discazo que decepcionará a pocos, pues seguramente nos encontremos con uno de los mejores trabajos de este 2013, con el permiso de los QOTSA. Dicho esto, comencemos a diseccionar el disco.

Dentro de los 14 temas que componen el álbum pueden encontrarse continuas referencias a sus anteriores trabajos. El tema ‘Copy of A’ comienza con una declaración reveladora “…I’m just a copy of a copy (bis…), everything I’ve said has come before…”. Aclaremos esto, NIN no copia a sus anteriores trabajos, pero bebe de ellos. No esperéis, por tanto, lo nunca visto, no se trata de eso. Más bien de un trabajo que se presenta como la culminación de un sonido que Nine Inch Nails ha ido desarrollando desde aquel brutal debut en el 1989 con “Pretty Hate Machine”.

Es interesante ver como incluye todas aquellas incorporaciones técnicas que ha ido acumulando a lo largo de los años, un proceder que deja marca. Desde su disco “With Teeth” que representó una ruptura con su pasado musical, Trent se siente muy cómodo trabajando con un programa de edición musical llamado Ableton Live, a quien llega a incluir en los agradecimientos. Se trata de uno de los programas más valorados por aquellos interesados en componer, grabar y producir música electrónica por su faceta altamente interactiva. Las posibilidades que surgen son enormes, y ello queda reflejado en la manera de componer. El programa se presta a cortar y pegar, a mezclar sonidos, a incorporar nuevos, y a editarlos como si se tratase de un juego. Con ello Trent crea secuencias de sonidos, compone divertidas percusiones a modo de beats y dibuja tétricas atmosferas sonoras como solo él sabe hacer. Esta veneración por lo electrónico queda patente al haber añadido, en su edición de lujo, un segundo CD con tres remixes, altamente recomendables.

Dentro del álbum, Russell Mills se ocupa del trabajo artístico, como ya hizo con “Downward Spiral”, consiguiendo dar una cuarta dimensión gracias a su peculiar estética. Produjo una serie de obras de técnica mixta de entre las cuales se seleccionaron cuatro para las portadas de las diferentes ediciones del álbum. Se trata de otro aficionado a destripar, rasgar, coser y maltratar, en este caso materiales e imágenes y no pistas de audio. Igual de oscuro e inquietante y con un resultado exquisito Rob Sheridan, ya un habitual en los anteriores trabajos, está a cargo de la dirección artística.

Y es que NIN ha sabido rodearse de buenos colaboradores. David Lynch, en su versión más experimental, ha rodado dos versiones para el single ‘Came Back Haunted’, Uno de ellos protagonizado por una cinta grabadora. El otro puede daros un buen viaje visual. ¡En el mal sentido! No está recomendado para aquellos que sufren epilepsia fotosensitiva y, después de haber quedado un poco aturdido, yo tampoco os lo recomiendo. Al igual que el tema ‘Copy of A’, ‘Came Back Haunted’ es una composición al más puro estilo ‘The Hand That Feeds’. Aunque como hemos dicho dentro de “Hesitation Marks” existe una gran variedad de versiones de NIN.

De hecho el álbum comienza con una sugerente pista ambiental titulada ‘The Eater of dreams’ en el que momentáneamente nos amenaza flirteando con atmosferas al estilo “Ghost I-IV”, aquel disco extremadamente ambiental y difícil de escuchar del primer al último tema. ¡Que no cunda el pánico!… hay para todos los gustos. ‘Find My Way’ nos presenta a un Trent más cercano, más sincero. En su remix Reznor reza, con órgano de iglesia incluido, y termina con arreglos más habituales en sus bandas sonoras que en sus discos de NIN.

Una dinámica con la que Trent Reznor acierta, y que se repite a lo largo del disco, es la de conseguir agrupar todos esos estilos y sonidos aparentemente alejados entre sí, darles sentido y asignarles una nueva identidad. En ‘All Time Low’ Trent coge un riff de guitarra funky para oscurecerlo y darle luces a base de bajo, sonidos atmosféricos y una guitarra inquietante. En ‘Disappointed’ rompe de nuevo el ritmo con un tema con percusiones poco habituales, mezcla sonidos varios a modo de loop que intercala en un tema con clara vocación de probocar y experimentar con un nuevo Frankenstein marca de la casa. Cualquier sonido es susceptible de conventirse en material para un tema de metal industrial. Todo ello hace que sean temas geniales pero difícilmente clasificables, al igual que sucede con ‘Various Methods of Escape’ y ‘Running’, probablemente los mejores temas del disco.

Pero el premio al tema más sorprendete se lo lleva ‘Everything’, más que nada porque ningún gurú de la música habría acertado al decir que NIN añadiría un tema tan 90’s. Quizás intente recuperar la moda de componer temas para Avril Lavigne. No niego que se trata de una interpretación interesante de un tema mainstream y ojalá al poner la radio todo los temas sonaran tan cojonudos como este. Por la letra de la canción, parece estar cansado de lo de siempre y busca hacer algo nuevo, quizás de ahí este tema, inédito en su registro.

‘Satellite’ es la encargada de adentrarnos de nuevo en el oscuro universo de NIN, cada día más poblado por fantasmagóricas voces redobladas e intercaladas con fraseos chillones, que multiplican a Trent hasta hacerlo omnipresente durante toda la pista… ¡por si no habíamos tenido suficiente!

También existen guiños a su época “Year Zero” en la entrada de ‘I Would for You’. Y como no… ¡no podían faltar contínuas referencias a “Fragile”! Aquella obra maestra épica, íntima, grandilocuente y analógica… todo ello a la vez. La fórmula le funcionó entonces y sigue funcionando ahora, por ejemplo, en el aplastante ‘In Two’, lo más parecido a una macedonia sonora al estilo NIN. Otra práctica habitual en Fragile, la de reutilizar las mismas pistas en temas diferentes, sucede en ‘Black Noise’ una tema instrumental en el que se recuperan pistas del tema ‘While I’m Still Here’.

Se trata de un disco repleto de detalles sonoros exquisitos y muy equilibrado, cuyo ritmo sube y baja manteniéndonos a la expectativa. Para aquellos que todavía quieran más, y estén interesados en la producción y masterización del disco, haceros saber que al adquirir el disco por la web de la banda se tiene acceso a una magnifica masterización alternativa (Audiophile Mastered Version) a cargo de Tom Baker. Una opción menos comercial para aquellos que quieran deleitarse con el disco nota por nota.

Escucha «Hesitation Marks» de Nine Inch Nails al completo:

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