Mucho había escuchado hablar de “Big Echo”, segundo disco de unos The Morning Benders de los que se decía que se habían resarcido de las pequeñas imperfecciones de aquel “Talking Through Tin Cans” de 2008. Las ganas eran evidentes y la emoción aumento una vez escuché el compacto y efectivo single ‘All Day Daylight’ pero a su manera el empezar escuchando este tema no hizo más que proyectar en el álbum una textura de la cual, en gran medida carece.
Si creéis que el álbum va a estar repleto de cortes como el citado sencillo estáis equivocados: “Big Echo” es un LP de indie pop que parece estar a medio camino entre las pretensiones atmosféricas de Grizzly Bear (¿curioso que Chris Taylor haya estado detrás del disco? Yo diría que no) y ese grado de compacto frenesí rural que se puede disfrutar en los últimos álbumes de Midlake. Esa medida justa que hace característico el sonido de The Morning Benders el gran aliciente de los californianos: pocos grupos del panorama indie internacional y ellos lo saben. El problema del disco reside, eso sí, en esa incapacidad de remate final que provocan que “Big Echo” no sea lo grande que podría llegar a ser. Si, es un buen disco pero le falta ese sexto sentido que lo acabe de alzar a la altura que se merece.
Puntuación: [71 de 100]
Fuente | Rockzone
