Jungle están de vuelta con su cuarto y nuevo trabajo, “Volcano” (11 de agosto) cuenta con una producción más innovadora, desde ritmos complejos a melodías soul que desafían los límites de un sonido cada vez más expansivo. El dúo formado por Joshua Lloyd-Watson y Tom McFarland’s ha sabido crear un sello de identidad reconocible por la mezcla de ritmos soul y funky y ese gusto exquisito por la instrumentación en vivo, y que les consolida como una de las bandas más interesantes e innovadoras del panorama musical.
Los británicos expanden su creatividad en las piezas visuales que acompañan a cada tema. Los vídeos que producen, dirigidos también por el propio Josh, nos emocionan a través de enérgicas coreografías e historias que se conectan entre ellos.
Con un extenso tour por delante en Norteamérica y Europa, donde pasarán por Barcelona y Madrid con su poderoso y eléctrico show, un enérgico directo que invita a bailar sin poder parar. Hablamos de ello con Josh vía zoom desde un inusual día soleado en Londres.
Vuestro nuevo álbum llega después de dos años de “Loving In Stereo”, habiendo estado de tour y con otros proyectos a la vez, ¿cuándo sentisteis que era momento de lanzar otro álbum tan seguido?
Lo queríamos lanzar rápido, era importante que mantuviéramos el momentum. Con el tercer trabajo y la gira todo iba super bien, fuimos afortunados de que justo cuando llegó el covid habíamos decidido parar, y cuando todo volvió a la normalidad decidimos volver al estudio de Metrópolis. Entramos a final de 2022 y teníamos dieciséis días más o menos hasta lanzarlo por Navidad, no es mucho tiempo para grabar un disco y no podíamos girar durante un año con él, volver a modificarlo y repensarlo, así que el proceso fue más rápido.
Durante estos años, y también con mi proyecto personal, he aprendido que cuando haces música con el instinto en vez de con la cabeza el proceso emocional es mucho más fácil, la energía va directa a todo el mundo. Cuanto más piensas en lo que estás haciendo, el trabajo pierde su sentido y acaba desmoronándose.
El álbum se llama “Volcano”, suena muy prominente y poderoso, como una declaración de intenciones, de hecho, el primer tema ‘Holding On’ es muy potente, ¿de dónde parte el concepto del disco?
Parte de un sentimiento que teníamos en aquel momento, queríamos generar un impacto al principio del álbum con ‘Holding On’, un tema frenético, un tanto asustadizo e incluso molesto, queríamos que la gente pusiera el disco y pensara: un momento ¿qué es esto?. Queríamos que funcionase como una película, que cogiera la atención del público al principio y hacia el final se generara más equilibrio.
Siendo dos cabezas pensantes en el proyecto, ¿cuál es vuestro proceso de creación?
Creo que cada vez que intentas repetir un proceso todo cambia, si aplicas una fórmula para componer un tema no funciona, lo que es muy fastidioso. Creo que es como pintar, intentamos crear de una manera abstracta sin pensar en lo que estamos haciendo, dejándonos llevar por el subconsciente, esto nos lleva a darnos cuenta de que a veces somos más profundos de lo que pensamos.
En cierto sentido, los arreglos musicales de “Volcano” parecen que llevan a una misma dirección de un sonido más compacto. La presencia del soul y disco que descubrimos en “Loving In Stereo” siguen presentes en este trabajo, ¿es algo que queríais mantener desde el principio?
La verdad es que no sabíamos ni siquiera que estábamos haciendo otro álbum, cuando estás creando algo nuevo es importante que no pienses mucho en la manera de proyectar, porque de esa manera no generas nada nuevo. Con nuestro álbum debut pensamos que la gente querría escuchar otro ‘Busy Earning’, pero así limitas tus pensamientos en una caja y Jungle no solo es eso, queremos que sea más cosas. Por ejemplo, hemos hecho añadido un off beat que suena muy techno en algunos temas, algo que no habíamos introducido anteriormente. Nos gusta expandirnos, absorber información y coger lo de mejor que nos rodea como todos los colaboradores que aportan al proyecto, hay un poco del gusto de cada uno en el disco.
Hace unos años creasteis vuestro propio sello discográfico Caiola Records, con el que habéis grabado “Loving In Stereo” y “Volcano”, ¿cómo es el proceso de trabajar en vuestro propio sello comparado con uno más grande?
La mayor diferencia es no tener a alguien que te diga qué está bien o mal creatívamente. Cuando te expones al público puede que tu material tenga un tinte comercial o no, pero si se empieza a infectar con diferentes opiniones, especialmente de gente que no son artistas, no es lo mismo. Es como con la pintura, que la galería te esté juzgando y diciendo que no está listo aún tu cuadro, piensas: ¿Para quién estoy creando realmente?
Cuando fichas por un grande tienes jugar el juego, tienes que estar preparado para recibir muchas opiniones, lo cual puede ser de ayuda, pero también confuso. Obviamente seguimos ligados a una empresa distribuidora, necesitas un elemento para vender el álbum, pero con Caiola tenemos más libertad para crear.

Escuché que en “Keep Moving” añadisteis y quitasteis capas y elementos acabando con una versión de 25 minutos, ¿os ha vuelto a pasar de nuevo?
‘Candle Flame’ ha sido remezclada miles de veces, el tema salió de otra canción que hicimos con un tempo mucho más lento de 100 bpm, una vez la empezamos a escuchar pensamos que la melodía era muy pegadiza. Era como si hubiéramos cogido todos los clásicos que teníamos en nuestra cabeza y los hubiéramos reinventado a nuestra manera, no somos de meter samples, pero si, de experimentar una y otra vez.
Anteriormente habéis usado micrófonos de los años 50 en las grabaciones, ¿habéis añadido algún instrumento de alguna era en particular o un equipo en concreto para conseguir un sonido más icónico?
¡100%! Parte de la grabación la hicimos en los Valentine Record Studios, un estudio en L.A. que cerró en los años 70. El tipo que lo regentaba era un ingeniero de Capital Records que decidió abrir su propio estudio durante las décadas de los 50 y 60, donde iban grandes bandas de swing a grabar. Cuando llegaron los 70s, el rock y la psicodelia se apoderó del panorama musical y el proceso de grabación pasó de ser más eficiente a más técnico. El tipo decidió cerrar el estudio y en su lugar, abrir un garaje justo en el local de al lado donde arreglaba coches de lujo. En 2015, después de que muriera, un amigo nuestro nos llevó allí y fue como abrir un museo, todo el equipo permanecía intacto. Para “I’ve Been In Love” usamos unos micrófonos y preamps que dan ese toque vintage. Todo dentro del local es de color naranja, teníamos este color en nuestra mente, así que ya sabes de donde sale la portada.
Hablar de Jungle no solo es hablar de Tom y Josh, siempre añadís más capas vocales, digamos que Jungle es un conjunto de gente cantando. Además, contáis incluso con más colaboradores esta vez, como Channel Tres, Bas (con el que ya habíais colaborado anteriormente), Roots Manuva y Erick the Architect.
Como trabajamos con mucha gente a lo largo del año, hemos construido una colección de sonidos que no están terminados. Así que cuando partimos de cero con un tema y necesitamos unas vocales, en vez de crearlas en ese momento volvemos a revisar esas grabaciones que tenemos desde hace cinco o seis años que estaban sin terminar. Es muy interesante el proceso, jugamos a mezclar. Por ejemplo, en ‘I’ve Been In Love’ Channel Tres nunca llegó a escuchar la melodía sobre la que está cantando, de hecho, si te fijas canta con un tempo distinto. Cogimos una canción que teníamos de antes y las juntamos, él no reacciona a la música simplemente crea algo personal, es como fusionar dos ideas que no se conocen y eso es muy especial.
Es un proceso realmente interesante, como crear un collage con distintos elementos…
Si, estas diferentes perspectivas es lo que hace a Jungle único y especial, si algo no funciona del modo que creíamos iba a funcionar, hay otro modo de hacerlo seguro. Si no tienes un cantante líder entonces todo el mundo puede cantar, supongo que mucha gente no entendía que era Jungle al principio, puesto que no es una banda al uso, es otro concepto, es todo y nada a la vez. Siempre quisimos que fuera así, que siempre que se vuelva a escucharnos sea algo diferente.
No se puede hablar de Jungle sin mencionar sus vídeos icónicos, que además codiriges. Por primera vez hacéis un cameo, donde se os ve desde atrás eligiendo diferentes pantallas en una sala de producción. ¿Tendremos también una pieza visual por cada tema como hicisteis con Loving In Stereo?
Si, hemos hecho catorce vídeos y los hemos grabamos en cuatro días, ¡fue super intenso y muy estresante a la vez! Por primera vez nos acercamos mucho a los bailarines para mostrar que tipo de relación tenemos con ellos en el escenario y fuera de él. Por ejemplo, ‘Candle Flame’ empieza en el escenario con una escena dentro de un programa ficticio de televisión, y cuando pasamos a ‘Dominoes’ justo se encuentran en el break y podemos ver esta relación entre ellos detrás de las cámaras, apreciamos una historia más profunda.
El personaje de Will West que salía en el vídeo de ‘Casio’, desaparece en el tercer álbum, entendemos que se ha ido a algún lado persiguiendo a la chica que le gusta, y durante Loving In Stereo aparece ella en una localización diferente y aislada, de hecho, de eso van todos los vídeos del álbum, un poco inspirado por la película Shutter Island en ese sentido. En esta nueva entrega, su historia se desarrolla aún más y la narrativa navega a través de todo lo que vamos contando.