Desde la distancia Rozi Plain nos recuerda (mucho) a una versión renovada de lo que Ben Howard ofrecía a principios de la pasada década. Lo suyo es el folk de cortavientos, de esencia puramente brit y naturaleza salvaje, pero con un aderezo mestizo que bien consigue conjugar electrónica ácida y ápices de soul en una misma oración. “Prize” es la master class de Rozi en ese sentido: letras y melodías transitan entre narrativas extremadamente humanas en un disco que se percibe como el mejor, y más complejo concebido hasta la fecha por la cantautora de Winchester.
Con motivo de una gira española que le llevará a actuar en Santiago de Compostela (6 de septiembre, Riquela), Madrid (7 de septiembre, Moby Dick), Valencia (8 de septiembre, Ram Club) y Barcelona (9 de septiembre, VOL), conversamos con Rozi para que nos revele de dónde ha surgido el oro que ha convertido “Prize” en el buen disco que es.
Grabaste “Prize” en diferentes localizaciones. Curiosamente una de ellas marcó una X en el País Vasco francés. ¿Qué te llevó a grabar allí?
Amaury, bajista de la banda, tiene un amigo que lleva un estudio llamado Shorebreaker en Tarnos. Decidimos que sería divertido reunirnos todos allí. A causa de la pandemia nos llevó nuestro tiempo el poder coincidir en ese lugar pero al final resultó ser de lo más emocionante el poder pillar un ferry nocturno para ir a España, desde donde posteriormente fuimos hacia el sur de Francia.
País Vasco francés, Londres, Bristol, Glasgow… Este álbum se ha concebido en muchos lugares diferentes. ¿Consideras que melódicamente y/o conceptualmente cuenta con algún arraigo a las localizaciones que acabas visitando?
Supongo que tiene sentido que tenga cierto arraigo porque paso mucho tiempo de gira por diferentes lugares. Creo que me resulta difícil determinar cuánta influencia directa tiene la música de ciertas geografías, pero sí sé que la música está directamente influenciada por nuestras experiencias de vida, que implican mucho movimiento y cambio. Puede haber una energía tan diferente día a día al moverse de un lugar a otro que realmente aprecio la oportunidad de sorprenderme, distraerme o emocionarme con tantos entornos cambiantes. Tanto cambio aporta mucha vida, creo.
¿Cómo fue trabajar con Jamie Whitby-Coles en esta ocasión?
Bueno, siempre es un placer trabajar con Jamie. Tiene una forma de escuchar muy atenta y paciente. Contamos con un buen lenguaje de trabajo. Es agradable saber el hecho que [él] resalta las cosas que son buenas cuando yo estaría dispuesta a desecharlas. Como es el batería, su atención al detalle con los ritmos más profundos de las cosas es simplemente inigualable. Nadie atesora un ritmo como el de Jamie. Es muy bueno al dar con él en todos los aspectos de la música.
“Prize” cuenta con una personalidad muy marcada marcado esencialmente por el estado de ánimo que describe el álbum. ¿Qué tipo de imágenes visuales te vienen a la mente cuando piensas en las letras y melodías de “Prize”?
Recientemente respondí una pregunta similar y se me vino a la cabeza la palabra “cercanía”. Creo que muchas de las letras cuentan con una mayor sensación de proximidad que otras canciones que he escrito, y supongo que se creó en un momento vivido con tanta intimidad en todo el mundo (2020-2022) que tiene sentido para mí que en él aflore esta sensación. Pasamos mucho tiempo trabajando en la música antes de grabarla, lo cual es algo que no había hecho con tanto detalle antes. Creo que tal vez eso le da un poco más de claridad que en trabajos anteriores…
‘Help’ es un tema maravilloso que parece mezclar diferentes géneros en una misma canción. ¿Cómo llegaste a concebir un tema así?¿Tenías algún tipo de referencia en tema al hacer esta pieza?
El núcleo de esa canción me llegó en el período de tiempo que pasé en Glasgow trabajando con Gerard y Jamie antes de la grabación final. Hicimos una demo que me hizo “click”, hecho que me motivó a probar cosas encima de ella. Gerard contaba con un nuevo kit llamado DFAM. Pasamos algo a través de él que le dio un ritmo ondulado muy encantador; estábamos todos tan encantados y sorprendidos por ello que nos quedamos despiertos toda la noche trabajando. Al día siguiente metimos las manos en la masa de manera similar con la canción ‘Prove Your Good’. Fue en realidad una de mis experiencias de trabajo más agradables; simplemente sentíamos que los tres estábamos completamente comprometidos y moviéndonos como una sola unidad.
“Prize” parece ser tu álbum más “360” de los que has hecho hasta ahora. Es el más completo y también el más complejo en cuanto a sonido. ¿Tuviste alguna referencia musical específica al pensar en cómo querías que sonara “Prize”?
Cuando estábamos de gira antes de la pandemia, escuchamos mucho un álbum llamado “Persona” de Bertrand Belin. Creo que realmente ese álbum fue una referencia; es muy refinado pero a su vez cuenta con mucho humor y mucha profundidad. Presenta estallidos de una extraña emoción y una calma realmente cautivadora.

¿Hiciste algún tipo de cambio específico en la forma de componer entre “What A Boost” o “Prize”?
Difícil de decir. Siento que las letras en este álbum están un poco más enfocadas hacia algo específico que en cosas anteriores que hemos hecho. También hay incluso menos letras que en los álbumes anteriores. Bueno, de todos modos jamás he empleado muchas letras. ¡Tal vez en el próximo álbum reduzcamos las de una canción a una sola palabra!
“Prize” cuenta con una producción maravillosa. En ese sentido debéis haber podido emplear de un equipo de alta gama. ¿Qué tipo de pedales o instrumentos son los que has utilizado principalmente en el trabajo?
Sí, creo que existen diferentes movidas en el disco. Probablemente el “man of the match” de este álbum es el Hydrasynth, un nuevo sintetizador que Gerard compró y que aporta un sabor muy interesante a muchas de las canciones.
Gerard también interpreta mucho el Juno y el Moog Grandmother en el álbum. También utilizamos un pequeño dictáfono creado por Realistic para poder grabar el piano en ‘Prove Your Good’. James Howard, a la guitarra, empleó muchos pedales diferentes que no podría nombrar. No hacían que la guitarra sonase como una guitarra. Cole Pulice interpreta el saxófono pero tampoco suena como tal.
¿Sientes que es fácil (o no) traducir ese tipo de sonidos “glitchy” de “Prize” (como, por ejemplo, los de ‘Painted The Room’) a un formato en vivo? ¿Y por qué?
¡Sí! Hay tantas cosas ridículas en ‘Painted The Room’ que pensé que tal vez nunca podríamos tocarla en vivo. Pero, por supuesto, no necesitas todo en la grabación para que suene como la canción; la banda es muy buena eligiendo los elementos clave que la conforman y me sorprendió lo rápido que esta canción se acabó de juntar para tocarla en vivo. Jamie estaba realmente interesado en tener un sampler con muchos sonidos importantes del álbum; por alguna razón, al principio yo era un poco reacia a esto (creo que pensé “oh, no necesitamos que suene exactamente como el álbum”), pero estoy muy contenta de que se haya mantenido ahí.
Muchos de los sonidos en este álbum se sintieron realmente especiales y nuevos. Es realmente, realmente maravilloso poderlos haber trasladado a un formato en vivo. Y es increíble cuando estos sonidos son lo que otras personas han tocado. ¡Con solo tocar un botón hemos podido conseguir que Cole Pulice llegue a tocar el saxofón con nosotros!
Vimos en una entrevista que firmaste un contrato con tu sello donde acordaste que “Prize” tendría 10 pistas. ¿Sentiste un poco de presión al saber que tenías que alcanzar ese número?
Ups, me siento mal por decir esto, supongo que era solo una medida para que no enviara una única pieza conceptual de 45 minutos y dijera “ese es el álbum”. Podría haber sido difícil para ellos trabajar con eso. Pero sí, 10 canciones me parece bien y no creo que siempre lo haya hecho de forma deliberada. Así es como ha sido siempre. Todo me lleva un tiempo de trabajo, así que no suelo tener mucho material de sobra. 10 temas me parece una cifra para tener en el punto de mira.
Harás una gira bastante extensa en nuestro país este septiembre. ¿Qué podemos esperar en los conciertos que harás aquí en España?
Podéis esperar una gran alegría por tocar en España por primera vez. ¡Nos vemos allí!