Hay bandas que, sin pretenderlo, acabas teniendo muy presentes. Los ves en algún festival, son teloneros de una banda que te mola, te arrastra algún colega… y antes de que te des cuenta ya llenan salas por toda Europa. Lo de Editors podría ser algo así, aunque su ascenso no ha sido de un día para otro.
En febrero de 2006 la banda presentaba por primera vez “The Back Room” en la sala Razzmatazz. Cosas de la vida, 13 años después y también en febrero la banda vuelve a la misma sala, esta vez con seis discos de estudio en su haber y un recopilatorio recién estrenado. Después de más de una década pisando tablas, no está mal pararse a celebrar todo lo conseguido. Con «Black Gold», su primer recopilatorio, Editors hacen precisamente eso y además quieren que los acompañemos en su viaje.
Su tour más antológico hará parada en Madrid (17 de febrero, WiZink Center) y Barcelona (18 de febrero, Razzmatazz). Con motivo de su visita hablamos con Ed Lay, batería de la banda, repasando algunos de los momentos más significativos de su carrera.
En octubre presentasteis «Black Gold» , vuestro primer recopilatorio. Pregunta obligada: ¿Por qué ahora?
Simplemente sentíamos que era el momento adecuado. Justo ahora tenemos tres álbumes con nuestro line up original y tres desde que llegó Justin (Lockey), sentíamos que era el punto intermedio perfecto entre una etapa y otra, muy distintas entre ellas. Unir esas dos épocas en un mismo álbum creo que es algo inclusivo para los fans, sin importar si llevaban con nosotros desde nuestro segundo álbum o nos conocían desde hace poco.
¿Fue difícil escoger los temas?
Fue difícil, mucho. Queríamos hacer algo consistente, pero sin ser demasiado obvios. Incluir los temas que adora todo el mundo, pero también los que habían marcado nuestra trayectoria como banda. Obviamente, si le preguntas a cada uno de nosotros, «Black Gold» hubiese tenido una selección completamente diferente. Siempre estamos tratando de hacer cosas nuevas, de un álbum para otro siempre tratamos de ir un poco más allá. Por eso está bien reunir toda esta música que hemos hecho a lo largo de los años, ponerla en un mismo lugar, dejar que fluya. Es algo realmente especial.
Está bien pararse a mirar las cosas en perspectiva de vez en cuando.
Exacto. Lo mejor de “Black Gold” es que en este momento podíamos hacer una parada, que llegaba de forma muy natural. Pero esas ganas de seguir experimentando, de escoger cosas distintas…está en nuestra naturaleza como banda. Algo que teníamos muy claro es que queríamos incluir algún tema nuevo como ‘Upside Down’ para anticipar un poco lo que hemos estado trabajando estos meses. Siempre estamos hambrientos por crear, hay mucho más en camino. Pero una cosa no quita la otra. ahora, de momento, queremos disfrutar al máximo de este tour tan especial, recuperando canciones que hace tiempo que no tocamos y conectando toda nuestra discografía.
Pues sigamos conectando vuestra discografía. “The Back Room” fue el álbum con el que os abristeis al mundo. ¿Cómo ves este disco desde el momento actual?
Hoy estoy en Birmingham así que es un buen día para hablar de» The Back Room». Lo grabamos aquí, donde siempre habíamos ensayado cuando éramos chavales, vivíamos aquí, trabajábamos aquí… Birmingham era nuestro mundo, y Birmingham encapsula todo lo que es este álbum. De la época de «The Back Room» es fácil pensar en temas como ‘Bullet’ y ‘Munich’, pero creo que la canción que más define esa época es Camera. Camera nos permitía experimentar con ordenadores, sintes… elementos que hemos ido incorporando en nuestro directo y sonido posterior. Puede que no sea la primera canción con la que alguien nos definiría, pero creo que viendo las cosas con perspectiva y sobre todo considerando la dirección que hemos tomado en los últimos años, fue una canción que nos dio pie para experimentar experimentar ya desde nuestros inicios, sin tan siquiera darnos cuenta entonces.
Y poco después ya llegó el boom definitivo con «In This Light In This Evening».
Con «An End Has A Start» teníamos bastante éxito, la gente nos conocía en Reino Unido, pero con «In This Light In this Evening” dejamos de ser una banda nueva: nos encontramos. Y a partir de ahí… Las cosas se pusieron intensas. Fue una época increíble, tocamos por toda Europa con bandas que admirábamos como The Cure y Muse, llegaron un montón de festivales, nos atrevimos a ir por caminos más oscuros y góticos en algunos momentos… y después de todo eso, nos encontramos con el momento más difícil en nuestra carrera.

Como comentabas, la salida de Chris Urbanowicz en 2013 marca un punto de inflexión entre una etapa y otra. ¿Cómo lo vivisteis?
Estaba en shock, no sabía cómo íbamos a seguir. La salida de Chris coincidió con una especie de transición. Cuando estás en una banda durante tanto tiempo, hay idas y venidas, a veces estás arriba y otras más bajo. Era la primera vez que nos enfrentábamos a algo así, estábamos algo confusos. Por eso creo que “The Weight Of Your Love” es nuestro renacimiento, salió algo precioso con mucho significado, temas delicados como ‘Sugar’ que no habríamos podido hacer antes. Por eso creo también que la llegada de Justin fue también una oportunidad de adentrarnos con más libertad en otros sonidos, que son los que definen cómo somos ahora. Lo hicimos en Nashville, lejos de casa y fue algo precioso y con mucho significado.
¿Crees que ahora sois más libres?
Sí, sin duda. Con “The Weight Of Your Love” decidimos trabajar en Nashville, lejos de casa, con un equipo de productores fantástico, pero con “In Dream” decidimos apostar por algo completamente distinto. No queremos sacar dos discos iguales. ”In Dream” fue un disco más introspectivo, nos encerramos durante un mes los cinco, empujándonos entre nosotros para ir más allá. A nuestra manera, la energía fluyó de un modo distinto. Siguiendo con esa idea de hacer algo distinto siempre, en “Violence” si contamos con más voces externas y creo que nos sentó bien. “Violence” es el disco que une todos los puntos: la electrónica, la euforia de «The End Has a Start», el alma de «The Weight of Love»…simplemente todo encaja. La gente que nos escuchaba por nuestros primeros discos volvió con “Violence”.
Y ahora…¿Qué es lo próximo?
Disfrutar del tour. Estamos trabajando en nuevo material, no hay duda que será pronto, pero no sabemos cuándo. Queremos disfrutar de este tour, recuperando temas, aunque es difícil decir cuales incluiremos y cuales no…quién sabe, quizás volvemos a tocar una de nuestras canciones antiguas y la tenemos que sacar del set al día siguiente porque nadie quiere volver a escucharla.
¿Te imaginabas que llegarías hasta aquí?
Crecí escuchando bandas como Deftones y Nirvana, pero todos teníamos backgrounds musicales completamente diferentes. Lo que más nos unía es que íbamos a un montón de conciertos juntos. Ya desde el principio la manera en la que Tom escribe letras, esa forma única de unir historias a través de la música es algo que nos hizo darnos cuenta que lo que estábamos creando podía trascender en el tiempo. Estar en una banda, lanzar seis discos… creo que nadie se lo puede esperar. Lo vemos mucho. Bandas que sacan un par de álbumes y eso es todo. Somos afortunados. Hemos ido a un montón de sitios, ya no vemos Reino Unido como nuestro único escenario. Podemos ir a Alemania y hacer un tour con varias fechas, o volver a España y saber que tenemos fans ahí. No teníamos ningún plan, hemos continuado a pesar de todo. Esa es nuestra filosofía: Just Keep Going. Y no nos ha ido mal.