Son el fenómeno guitarrero del momento: Militarie Gun, afincados en Los Ángeles pero originarios de Seattle en buena medida, han sacudido el mundo musical con “Life Under The Gun“, álbum debut internacional editado por Loma Vista (St. Vincent, Rise Against) que reboza melodías enganchadizas con una sartén saturada de riffs de lo más gruesos. Su movida, de distintiva base punk rock y savia gratamente familiar, dispara balas sin tapujos, y por todos los flancos.
Aprovechando que el grupo estrenó LP el mismo día (viernes 23) que se dejaba caer por el Outbreak Festival de Manchester, desde Binaural contamos con la gran suerte de poder concertar 30 minutos de encuentro con Ian Shelton, corazón y cerebro de la formación. El frontman, lejos de mostrarse como un “newbie” del sector (de hecho también lleva un tiempo colaborando en Regional Justice Center), nos explicó de forma detallada como el “momentum” que está viviendo Militarie Gun se ha materializado por trabajo duro y pura meritocracia.
Es increíble todo lo que habéis llegado a conseguir en dos o tres años.
Nuestro primer concierto fue en verano de 2021. Es alucinante todo lo que nos está pasando. Creía que tardaríamos años en conseguir lo que hemos conseguido, y aquí estamos.
Resulta increíble pensar que ya hemos estado dos veces por el Reino Unido. De hecho estamos intentando ir a España pero es bastante costoso el hecho de poder bajar a tocar allí. Algún día lo haremos.
Toda tu historia con Militarie Gun arranca de un período de composición en 2020, ¿no?
Sí, esto fue en mayo de 2020. Poco después, ya en agosto, acabamos nuestro primer EP.
¿Cuándo fue que empezaste a ver que el proyecto tiraba?
Desde los dos primeros temas. A la gente parecía que le gustaba, y por eso nos lanzamos al 7”. Pese a que ya estaba obseso con el proyecto, las escuchas y todo lo demás me ayudó a mantenerme concentrado en componer. De hecho entonces era lo único que podía hacer: aún no se podía girar. Fue como componer tres discos enteros y entonces lanzarnos a girar. Hoy sacamos “Life Under The Gun”, disco del que produjimos demos en tres ocasiones diferentes.
¿Cómo es que requeristeis de tres veces para acabarlas?
Quería que fuesen mejores de lo que eran. También sabíamos que no teníamos el dinero para grabar un álbum por lo que nos llevó un tiempo el tener pasta para poder grabarlo.
¿Cuáles eran los cambios más notorios de los existentes entre esas demos?
Mayoritariamente era algo relacionado con cómo se mostraban de vulnerables mis partes vocales. Lo instrumental se modificó muy poquito. En lo vocal quise dar un giro para que se adaptase a aquello que quería que fuese. Deseaba encontrar el perfecto equilibrio entre agresividad y melodía en todos los elementos. También a nivel tonal.

Por lo que dices pareces ser una persona bastante perfeccionista.
Sí lo soy en lo relativo al producto final. Eso sí: creo que existe un error al pensar en el concepto de “perfeccionista” porque se suele pensar que el perfeccionismo debe estar implícito en la primera fase de creación. Considero que esa fase debe ser caótica, incluso puede ser desastrosa. Si trabajásemos así no sacaríamos nada allí fuera, no es como trabajamos. Solemos crear muchas cosas y entonces, en ese punto, empezar a acortar el material.
Recuerdo que en este último LP cambiasteis la persona a cargo de la mezcla, ¿verdad?
Sí. Esto fue por lo siguiente: el proyecto cuenta con dos cerebros. Uno es el cerebro del pop, y otro es el cerebro del hardcore.Taylor Young es, sin lugar a dudas, la persona perfecta para grabar hardcore. Trabajamos con él en el pasado.
Grabamos con él en el material Studio 606 de Dave Grohl. Y dimos el material a Mark Needham. El tío ha trabajado en el “Hot Fuzz” de The Killers y también ha hecho cosas con Imagine Dragons y Dolly Parton. Aún y así, viene del hardcore por lo que entendía bien el asunto. Todo pasó por construir ese elemento que contaba con dos cerebros. Aquí está el hardcore, aquí está el pop.
¿Este asunto de los dos cerebros es algo que siempre tienes en mente a la hora de pensar en la banda?
Sí, porque no existe ningún lugar al que hayamos dicho que no iremos de forma decidida. Es como los temas ‘Never Fucked Up Once’ o ‘Seizure Of Assets’: son piezas de pop rock pero suenan más duras de lo convencional.
‘Never Fucked Up Once’ es un hit. Recuerda mucho a Blink-182.
¿Sí? Bueno, de hecho la hice pensando en Third Eye Blind.
En esos casos trato de cantar de forma más agresiva, y me focalizo en la idea de que las letras digan algo más. De esa manera consigo encontrar ese equilibrio del que te hablaba. ‘Never Fucked Up Once’ es una canción sobre arrepentimientos.
Esta semana habéis estado apareciendo en todos lados. Rolling Stone, Stereogum… También han salido muy buenas reseñas haciendo referencia al disco.
¡Sí! También me ha gustado la vuestra.
Ah, ¿sí?
Sí, no me he enterado de nada porque es en otro idioma pero vi la puntuación. Al leerla me dije: “hay que hacer esta entrevista” (risas).
Muchas reseñas hacen referencias a las mezclas de estilos de Militarie Gun. Algunos incluso hablan de que hay ramalazos brit pop en el disco. ¿Coincides con ello?
No creo que sea algo consciente. Me da que eso viene por una colaboración que hicimos (‘Pressure Cooker’, con Dazy), que es un tema muy británico. Creo que en muchos sentidos somos un grupo muy americano. Creo que la gente proyecta muchas cosas a la hora de hablar sobre algo. Cuando me dicen que nos parecemos a algo yo digo: “ok”. Es como cuando nos dicen que nos parecemos a Oasis. Eso no tiene sentido alguno. Pero oye, todo bien. Seguro. Me parece bien todo lo que se diga sobre Militarie Gun.
Por lo que dices se nota que te lees bastante lo que la prensa habla sobre tu banda. ¿Cómo procesas leer algo tan relativo a tu creatividad?
Es difícil leer prensa. Y he leído tantas cosas que no son ciertas sobre nosotros que eso me ha hecho reducir lo que leo de ella. No quiero estar enviando correcciones a los medios, ni nada por el estilo. No es algo divertido. Si pones algo que no sea correcto, haz lo que quieras. Adoro hacer entrevistas, y adoro conocer a la gente. Esa es la parte divertida de la promo.
Los que componemos música estamos haciendo lo mismo que estás haciendo tú. Estamos apostando por una pasión pese a estados financieros. Es lo que nos motiva por encima de todas las cosas.
He revisado vuestro historial de movimiento y he podido comprobar que habéis girado mucho. ¿Cómo empiezas a llevar eso de estar tiempo fuera de casa?
Es difícil para mí porque preferiría estar componiendo. Es así.
¿No puedes componer estando de gira?
Puedo componer riffs pero la parte vocal no. No me salen temas. Mi lado creativo está tan electrocutado por los directos, por cómo recibe la gente los temas, que no me sale. Y paso mucho tiempo en la furgo.
¿Cómo encuentras el equilibrio entre girar y componer en casa?
No existe equilibrio. No lo hay. Estaré de nuevo en casa entre julio y agosto. Intentaré hacer todo lo que pueda en ese período de tiempo.
Una cosa que nos ha diferenciado con otras bandas pasa por cosas como lo que pasó en la pandemia: en esos tiempos dedicamos una jornada completa a componer. No había nada más. Iba al local de ensayo cada día. Por eso hicimos tantos temas. Algunos de ellos están ahí fuera, y otros muchos, por ser malos, jamás vieron la luz. Si amo hacer esto, ¿por qué no hacerlo cada día?
¿Qué planes hay para lo que se avecina?
Vamos a hacer algunos festivales. Después en agosto estaré un poco “off” pero vamos, ahora te digo que estaré bien pero fijo que entonces estaré poniéndome las manos sobre la cabeza. Después giraremos con Scowl por Estados Unidos y estaremos de gira europea en otoño.