Muchos de nosotros sabemos quién era Malcolm McLaren, conocido por todos como uno de los emprendedores más relevantes del mundo del punk, pero practicamente ninguno sabe como era la personalidad que configuraba a una de las figuras musicales más intrigantes de los últimos 30 años. Complejo, visceral, irascible, lunático… mucho se ha hablado sobre el pero solo han habido unos pocos que saben a ciencia cierta como era el manager de los Sex Pistols. Una de estas personas era Lauren Hutton, exnovia del difunto representante del mundo del punk que salió con Malcolm durante un total de 4 años y que esta semana se ha decidido a relatar algunos detalles de este periodo al The Guardian británico.
Aquí abajo adjuntamos una transcripción que hemos realizado de algunos de los parrafos de este curioso e interesante artículo. Aún y así os animamos que entréis a The Guardian y lo reviseis en su plenitud ya que es de esos documentos que han de ser leídos de arriba a abajo.
“Nos conocimos en 1983 cuando una amiga y yo fuimos a ver a Prince tocar en Hollywood. En el viaje de vuelta nos paramos en Morton’s, lugar al que van todos los que son alguien en Hollywood. Malcolm salía del local cuando nosotros entrábamos. Justo hacía poco que leí en una entrevista sobre aquel tipo que decía todas aquellas cosas que nadie de Hollywood diría y que te llevan a estar con demandas día sí y día también. Me acuerdo que pensaba: “Tengo que conocer a este chico”. Y allí estaba el con Steve Jones de los Sex Pistols. Cuando le pregunté si era Malcolm McLaren el saltó en el aire, dió una vuelta, aterrizó y dijo: “SI!”. Su pelo se volvió loco como una gran bola de pelusa. Así es como empezó todo.
Cuando nos conocimos yo tenía 42 años y el 39 aunque Malcolm pensaba que tenía 26. Salimos durante 4 años y llegué a conocerlo tanto por dentro como por fuera. Era extremadamente inteligente y muy autosuficiente pero también tenía una personalidad bastante complicada.” – comentaba Lauren a The Guardian. “Me contaba historias de como se había criado bajo la tutela de su abuela Rose. Ella estaba local. Lo vestía como una chica y no le dejó ir al colegio hasta que tuvo 10 años. Cada noche lo sentaba en una esquina de una habitación mientras sus hermanas le leian novelas de Brontës y Dickens. Es de estos momentos de donde extrajo su amor por Fagin And The Artful Dodger. Esas fueron sus verdaderas influencias a nivel de formación.
Una vez lo llevé a la playa de Santa Monica. Esa fue la primera vez que estaba cerca del mar. Rose no dejaba que se bañase en él debido a que los peces meaban ahí dentro. Si, a veces lo llevaba a pasar un día a la playa pero le cubria las piernas con sabanas para protegerlo del sol y le ponía algas en el pelo ya que creía que eso era beneficioso para Malcolm. De locos.”